Nuestra historia, pasado, presente y futuro.
Implementar acciones para el desarrollo del Gobierno Parroquial, dinamizar los proyectos de obras y servicios con calidad e igualdad de oportunidades, que aseguren el desarrollo social y la reactivación económica de la población en especial de quien más lo necesita, con la participación directa y efectiva de los diferentes actores sociales y dentro de un marco de transparencia, ética institucional y el uso óptimo del talento humano altamente comprometidos, capacitados y motivados.
Convertir a nuestra querida parroquia en un referente dinámico de cambio, cuyas características de crecimiento, estén marcadas por la activa participación de los distintos actores sociales con una planificación previa que implique la responsabilidad social de sus entes y organizaciones, y cuyas actividades productivas optimicen el talento humano, tecnológico y natural, permitiendo el desarrollo integral de la parroquia julcuy, en una armónica relación hombre-naturaleza, que vaya consolidando su identidad de pueblo trabajador, pujante y soñador.
EN ÉPOCA DE CONQUISTA ESPAÑOLA
SIGLO XVI.-Desde los tiempos PROTOHISTÓRICOS, ya existió en el valle de JULCUY una pequeña Comarca o parcialidades de indígenas con el nombre de PICALAUSEME: formado por la montaña y el valle que comprende la parroquia Julcuy, con 15 tributarios, 4 reservados, 3 casados y 5 niñas.
La industria del algodón y lana, de renombre en los pueblos de la PROVINCIA DE MANABÍ, comenzó a extinguirse a principio de este siglo, a causa del comercio abierto con España, y en el paso obligado de los buques por CALANGA (Salango), que vendían telas a bajo precio, mediante la libertad para el contrabando; dejaron las telas y se dedicaron al trabajo de SOMBRERO DE PAJA TOQUILLA. Este invento se debe a la propia iniciativa de un hijo del pueblo PICALAUSEME (Julcuy), hoy parroquia del cantón Jipijapa, con materiales también autóctonos, el mismo que se llamó DOMINGO CHOÉZ. Según referencias tradicionales, se dice que el nombre de JULCUY proviene porque en este valle en tiempo de invierno existían y siguen existiendo muchas CUCUYES (luciérnagas), que en las noches brindan un espectáculo maravilloso. Pareciera que el firmamento de nuestro sistema solar estese a la vista. Orgullosamente a esta parroquia ya se la conoce con el nombre de JULCUY a nivel mundial, y se debe por sus encantos arqueológicos y turísticos que tienen para proporcionar.
LLEGANDO A LA EPOCA PREHISTORICA.- CUANDO SE EFECTÚO LA PRIMERA DIVISIÓN TERRITORIAL EN EL AÑO DE 1763
En esta época que se erigió con Autoridad Real, al Gobierno Mayor de Guayaquil, vino a formar parte de este Corregimiento, la Tenencia de Portoviejo, que antes dependió directamente de Quito. Con este motivo, la comunidad de “San Lorenzo de Jipijapa”,fue elevada a la categoría de PARROQUIA perteneciente a la Tenencia de Portoviejo, con la inclusión de sus importantes poblados de San Juan Bautista de Paján y JULCUY, que después se catalogaron como Vice parroquias de Jipijapa.
CAPITULO III
SEGUNDA DIVISIÓN TERRITORIAL
1824-Junio 25.- En esta fecha, el Congreso Colombiano, expidió la correspondiente Ley de División Territorial, mediante la cual, constituyeron los Departamentos de ECUADOR (Quito), de GUAYAQUIL y de AZUAY. El departamento de Guayaquil, se integró con las provincias de Guayas y MANABÍ. La provincia de Manabí se formó con los cantones Portoviejo, Jipijapa y Montecristi.
El cantón JIPIJAPA, surgió a la vida política con sus tres parroquias: Jipijapa, JULCUY y Paján, dentro de la jurisdicción comunal adquirida y posesionada en octubre del año 1805, constituyéndose así, la mitad de la provincia o sea el SUR DE MANABÍ. De acuerdo a los reales títulos obtenidos por el CACIQUE INOCENCIO PARRALES Y GUALE, del Rey de España a favor del común de Indios de Jipijapa.
DESAVENENCIA POLÍTICA
En el año de 1917.- La parroquia Julcuy una de las más antiguas y una de las parroquias fundadores del cantón, célebre por haber nacido allí el indio Domingo Choez, que invento el tejido de paja toquilla, perdió poco a poco su auge y preponderancia porque decayó mucho la industria del sombrero que constituyo siempre su principal riqueza; en cambio, el caserío de POTRERO NUEVO, tomo durante los últimos años mucho crecimiento, por motivo del alto precio que adquirió la tagua, esto como consecuencia natural causo el decaimiento de la Antigua parroquia de Julcuy, y la creación de una nueva parroquia o sea la elevación del caserío de Potrero Nuevo a la categoría de parroquia con el nombre de Pedro Pablo Gómez, pasando automáticamente Julcuy a ser uno de los recintos de esta nueva parroquia.
CAPITULO V
LA HISTORIA Y LA DIGNIDAD NUNCA SE PIERDE
1938.- Julcuy un pueblo con una riqueza innata en la historia de nuestro antepasados, no podía perder su identidad, y así lo comprendió Don Daniel Baque Pincay, una persona una persona desinteresas y honorable, a toda prueba, valiente e incansable, no desmayo jamás en su intención y logro su objetivo el 4 de marzo de 1938, cuando una vez más JULCUY fue elevada a la categoría de parroquia rural del cantón Jipijapa, se creó en los caseríos de Julcuy, que será la cabecera parroquial, Las Peñas, Mero Seco, Cerro de Mero, Limón, Las Piñas, Pilas de Piñas, La Ciénega, Pozo Dulce, Agua Pato El Secal, Pan y Agua, Eloy Alfaro (Anegado), El Páramo, Pósito, La Crucita, Albajacal, La Trocal, Capelo, Petrillo y La Chirimoya. Los limites quedaron: por el norte con el cantón Jipijapa; por el sur con la parroquia Pedro Pablo Gómez; por el este Paján; y por el oeste con la parroquia Machalilla.
1956.- El 16 de marzo de 1956, con la creación de la parroquia El Anegado se redujo su superficie y actualmente los límites de JULCUY son: por el norte con el cantón Jipijapa; por el sur con la parroquia Pedro Pablo Gómez; por el este con la parroquia América; y por el oeste con el cantón Puerto López
Sus recintos son: El Guarango, El Secal, Agua Pato, La Pila, La Cancagua, Las Piñas, Las Pampas, Carrizal, Soledad, Mero Seco, Cerro de Mero, Barbal, Los Laureles y Las Chacras.
La parroquia Julcuy, cuenta con muchos atractivos turísticos descubiertos en estos últimos años, principalmente en sus zonas urbanas y fuera de ellas y son las siguientes:
En el recinto Agua Pato se encuentra una vertiente de agua azufrada.
Este es un plato tradicional de la parroquia julcuy, el cual se prepara con carne de chivo, condimentos, cerveza, se sirve con arroz maduro frito y aguacate.